Las Mafias Estudiantiles

El FSLN a partir de su derrota electoral en 1989 inició un proceso de reorganización en todas sus estructuras partidarias. Gobernar desde abajo alcanzó su mayor forma de expresión al contaminar el FSLN a todos los poderes del estado. Esta contaminación no pudo haberse
logrado sin la realización del vergonzoso Pacto Ortega-Alemán, alianza que fue denigrante para la mayoría de militantes sandinistas, pero saludable para los miembros del círculo de hierro del nuevo partido cuasi-burgués o de pseudo-izquierda, quienes reciben las prebendas traducidas en beneficios, exoneraciones, cargos públicos, coimas, etc. Todo eso lo sabe bien el pueblo nicaragüense.

 
Las organizaciones estudiantiles también han recibido la contaminación política de un partido que busca garantizar poder en todas las estructuras estatales para contar con serviles y aliados en todos sus niveles. Durante los gobiernos liberales el movimiento estudiantil fue utilizado como fuerza de choque y desestabilización. El 6% fue el pretexto ideal para salir a las calles y protestar por un beneficio que a todas luces los gobiernos liberales negaban a la comunidad
universitaria. Esta justa lucha fue capitalizada por líderes estudiantiles que empezaron a figurar con el único fin de acumular puntos a favor de una futura carrera política llegado el momento de abandonar los predios universitarios. El caso de Yasser Martínez es el
ejemplo típico del estudiante sin méritos académicos que ha escalado entre morteros y arengas para ahora devengar un jugoso salario de miles de dólares, ¿ Atractivo no?
 
La llegada al poder de Daniel Ortega (no del sandinismo) abre más posibilidades al reforzamiento de las estructuras estudiantiles vinculadas al círculo de hierro del FSLN, organizaciones que ahora lucen como mafias estudiantiles engolosinadas de poder y gloria, las
cuales reproducen exactamente los procedimientos o mecanismos de corrupción de las altas esferas gubernamentales. La UNAN León no ha estado al margen de este fenómeno oprobioso. El otorgamiento progresivo de cuotas de poder de las autoridades a las organizaciones
estudiantiles ha creado situaciones inverosímiles en la misma administración de la máxima casa de estudios. El poder en el Consejo Universitario de parte de los líderes estudiantiles compite con el poder de los gremios de profesores y trabajadores administrativos. Las
universidades estatales se han vuelto rehenes del poder estudiantil y todo, increíblemente de manera legal. Las decisiones del rector y sus decanos deben negociarse con el poder estudiantil, esto ha generado una mafia estudiantil que existe hasta hoy día. Y lo peor de todo es que la misma universidad a través de sus autoridades financian con un jugoso presupuesto a estas mafias estudiantiles.

Hoy en día es muy rentable y lucrativo ser dirigente estudiantil por la millonada de dinero que estos reciben y manejan a su antojo y discreción. Los guerras campales entre las mafias estudiantiles más que conflictos de poder son de índole económicos. A como dijo un catedrático en la última asamblea universitaria de la UNAN León, “se pelean porque el hueso es muy grande”. Por otro lado, la cultura de violencia promovida por el gobierno y acentuada a partir del fraude electoral de Noviembre 2008, ha tenido gran recepción en las mafias estudiantiles. La cultura del garrote (difundida a nivel internacional por el actual edil o alcalde impostor) ha llegado a las universidades como una expresión de terror o violencia, propia de los cobardes que con una mentalidad cavernícola esgrimen estas armas en lugar del diálogo y el debate de las ideas, a como se hace en los países civilizados. Los conflictos de poder entre mafias estudiantiles se acabarán el día que cese el presupuesto a sus dirigentes. Sin embargo,
no todas las causas de estos conflictos son económicas, en la actualidad, las autoridades han concedido a los líderes estudiantiles el privilegio de otorgar becas, cada dirigente recibe un paquete de becas que podrá asignar, regalar, negociar, vender, premiar, etc, a quien estime necesario o conveniente. Ahora, un estudiante otorga una beca a otro estudiante. Esto crea altas posibilidades de corrupción en una transacción que las autoridades universitarias no pueden controlar. A partir de esto podrían surgir desde coimas hasta favores sexuales.
 
Es conocido por muchos estudiantes que el día de los hechos violentos en León en Octubre del 2008, dirigentes estudiantiles llegaron de madrugada a las instalaciones de “la preparatoria” a levantar a los muchachos, hombres y mujeres, afuera esperaban camionetas del
Ministerio de salud con los garrotes y piedras bien acomodadas para ser distribuidas a las fuerzas de choque. Mientras los estudiantes eran levantados de sus camas, se escuchaba la voz de un líder estudiantil que gritaba “Arriba, hay que ir a defender la beca”. ¿Sabrán de esto los centenares de padres de familia de otros departamentos que mandan a sus hijos a prepararse para un futuro mejor?
 
También se sabe que cada día es más larga la lista de estudiantes que reciben una beca, otorgada por el líder estudiantil, con la única condición de regresar al mismo la cantidad de 100 córdobas mensuales a manera de impuesto.

 
Es casi imposible creer que las autoridades ignoren estos actos de corrupción.
 
Ojalá que muchos estudiantes de la UNAN LEON que lean o escuchen este escrito, tengan el valor de pronunciarse al respecto. Ayer fueron ventanas, puertas y escritorios destruidos; mañana podrían ser vidas de profesores o estudiantes las que se pierdan por la desmedida
ambición de las mafias estudiantiles.

¿Qué opinan de esto los que dicen defender el legado de Mariano Fiallos Gil?

Un profesor.

Algún lugar de la UNAN LEON.
 
 Marzo/2009.